El cerezo – curiosidades

Pertenece a la familia de las rosáceas. El árbol es originario de Grecia y fueron los romanos los que lo expandieron al resto de países. En lo que se refiere a las condiciones climáticas ideales, podemos afirmar que se trata de un árbol flexible que se adapta a clima templado. Tolera el frío hasta los -20º, pero las flores se pueden dañar a -2º.

Tiene una floración tardía, que permite su supervivencia a las heladas primaverales. Es de hoja caduca y puede llegar hasta los 25 metros de altura, y 0,60 de diámetro. La corteza de su tronco es lisa y de un rojizo muy característico. Sus flores son blancas de 5 pétalos, hermafrodita y cruzada por insectos.

Vive cerca de los 100 años, y es una especie de Europa y Asia Occidental, y se puede encontrar desde el sur de Escandinavia, hasta el Mediterráneo, incluidas las islas Británicas. En la Península Ibérica se encuentra en los Pirineos y zonas del Mediterráneo. No requiere grandes cantidades de agua, aunque no soporta los extremos. Las principales variedades de la actualidad son francesas o americanas con tamaño mayor y más sabrosas.

Su enfermedad más frecuente es la gomosis y los hongos del suelo. Una de las plagas más comunes en Europa es la mosca de la cereza, que daña los frutos.

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